Huella de carbono, todo lo que necesitas saber

Un término desconocido para muchos pero para otros es su trabajo del día a día, en este post trataremos de dar las pautas básicas para llegar a conocer que esto de la huella de carbono, sus utilidades y las métricas que se utilizan para calcularla así como las certificaciones que se pueden obtener.

imagesComencemos definiendo este término, la huella de carbono es la emisión de gases tanto de forma indirecta como directa de cualquier cosa ya hablemos de personas, productos u industria, es decir, cualquier objeto potencialmente emisor de CO2 ya sea en la mínima cantidad posible. Por ello y a razón de ser responsable socialmente con el medio se trata de reducir estas emisiones a la mínima expresión, creando un entorno de sostenibilidad y en cierta manera de competitividad entre empresas.

A raíz de esto surgen iniciativas sobre la métrica de otros gases perjudiciales para el medio, denominados comúnmente como Gases de Efecto Invernadero o GEI (CH4, PFCs entre otros) que son liberados a la atmósfera desde cualquier actividad cotidiana en nuestro día a día.

Para estancar o mitigar este problema se ha buscado realizar estudios sobre los hábitos tanto de industria como de individuos en sus actividades diarias, se parte de la base que cualquier actividad puede ser potencialmente emisora de gases y que no solo una actividad puede emitir un gas, sino que la fabricación de un elemento, ya hablemos de botellas de plástico o un simple calcetín son proclives a una emisión de gases diaria simplemente por los materiales con los que han sido fabricados, y son la base de una contaminación aparentemente silenciosa e ignorada.

Entonces, ¿para qué medir esta huella de carbono y cuáles son sus beneficios? Una de las principales causas es el cumplimiento de la legislación vigente, otros de los factores van desde el ahorro energético asociado a la eficiencia de producción hasta que tanto inversores como clientes exijan unos niveles bajos de estos gases, es decir, cumplir las bases de contratación con stakeholders. Una de las piezas clave de porque medir la huella de carbono es la diferenciación de marca además de ser respetuoso con el medio dotando a sus productos con características diferenciadoras al resto.

Con esto lo que se pretende aclarar es hacia dónde va dirigido toda esta actividad de medición de huella de carbono: motivación de la organización, exigencia de stakeholders o simplemente como medida de competitividad en el mercado.

El siguiente paso sería comenzar a medir esta huella, ¿Cómo medir la huella de carbono?, es muy sencillo, pero hemos de tener claro cuál va a ser el alcance que estamos dispuestos a medir, y dejar esclarecidas las fuentes emisoras de gases. Para definir este alcance se establecen 3 alcances: El primero incluye las emisiones directas de la propia organización y que son controladas por ella. En el segundo caso va más lejos habla sobre emisiones indirectas que se puedan generar desde centrales donde se genere energía y esta sea necesaria para la empresa que las contrata. Y el último y tercer caso siguen siendo emisiones indirectas pero esta vez se basa en fuentes que no forman parte de la empresa ni están controladas por ella.

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Entonces estableciendo esta parametrización en la medida de la huella de carbono, el siguiente paso es establecer dentro de la rutina cuales son las fuentes emisoras de gases en este paso no hay que obviar ningún objeto, recalco la idea que cualquier material debido a sus componentes puede llegar a ser emisor de gases.

Una buena manera de comenzar este trabajo es crear una base de datos donde definir: a) entradas y salidas y b) energía utilizada, emisiones directas de gases en todas ellas estableciendo cual es el tipo y la cantidad de las mismas.

¿Como sabemos cuál es nuestra huella de carbono? La medida es en toneladas de CO2 o tCO2, y su cálculo es con la multiplicación de cantidad emitida por un factor de emisión. Entendemos por cantidad el grado de actividad en CO2 y por el factor de emisión es la cantidad de gas por cada unidad de parámetro y varía en función del tipo de actividad CO2eq/Xm3. Y como resultado obtendríamos la cantidad (g, kg…) de CO2 equivalente. En la realización de esta fórmula hay que contar con  el balance de masa, determinar el tiempo de medición y productos que absorben CO2 pues podrá contarse en la huella de carbono. Os dejamos una calculadora para que podáis medir vuestra propia huella. Y aquí una serie de webs donde aparecen los factores de emisión: IPCC (Intergovernmental Panel on Climate Change) y en GHG (Green House Gases).

Con el compromiso tanto europeo como mundial la Comisión Europea Internacional de Estandarización ISO ha creado una metodología para la medición de la huella de carbono desde su hermana mayor PAS 2050 y GHG Protocol, donde la primera tiene un gran reconocimiento mundial en la medición de la huella, fue desarrollada por BSI, para la ISO destaca la ISO 14067 e ISO 14069. Para la huella de carbono corporativa hablamos de la anteriormente mencionada GHG Protocol, estas siglas proceden de GREEN HOUSE GASES desarrollado por el WRI (World Resource Insitute) y el WBCSD (World Business Council for Sustainable Development) dando una visión y concienciación sobre el marco de responsabilidad ambiental a nivel mundial.

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